Por centrarnos en un ejemplo, los derechos de la LFP rondan ahora mismo los 800 millones. No es una cifra fácilmente calculable puesto que cada club negocia individualmente, pero por ahí andan los tiros. Partiendo de ese ejemplo, la jugada maestra de la Premier League ha hecho saltar la banca, estableciendo un hito sin precedentes en la liga inglesa y poniendo tierra de por medio con respecto al resto de ligas europeas.
 
Los derechos de televisión de una de las mejores ligas del mundo caen en manos de Sky Sports yBT Sport, dos gigantes que han desembolsado la nada desdeñable cifra de 5.136 millones de libras, que al cambio vienen a ser casi 7.000 millones de euros, por un contrato en exclusiva de tres años, esto es, de 2016 a 2019. El nuevo contrato supone un 70% de incremento de beneficios con respecto al anterior contrato firmado (más de 3.000 millones de libras). Sky Sports es un viejo conocido y BT Sport, para quien no lo sepa, gestiona y desarrola el tinglado de telecomunicaciones en el Reino Unido (telefonía fija e internet) y ahora, además, ofrece contenidos de pago a sus abonados. En la subasta de la Premier quedó fuera la plataforma Virgin Media. El enfrentamiento entre Sky y BT, puesto que Sky ha visto seriamente amenazada su hegemonía con la entrada de BT, ha provocado que estemos hablando de estas estratosféricas cifras.

Por hacer números: el último clasificado recibirá unos 100 millones de libras por los aproximadamente 156 millones que se embolsará el primero de la tabla. La millonaria cifra de las plataformas nos deja cada segundo de la Premier a un precio de oro: sobre unas 1.900 libras. Cada partido de la competición pasa a tener un valor de 10 millones de libras. 

 

Así se verá la Premier.

En este nuevo contrato Sky Sports sigue manteniendo su privilegio. De los 7 paquetes que ofrece la Premier, Sky Sports se ha hecho con 5, por los que ha desembolsado 4.200 millones de libras (a razón de 1.400 millones anuales) para emitir 126 partidos. La plataforma tendrá el poder a la hora de elegir los partidos, asegurando que todos los equipos serán retransmitidos. Sky emitirá los encuentros de los sábados (13:45), domingos (14:30 y 17:00) y lunes noche. También emitirá la gran novedad que llega a partir de 2016: el partido de Premier del viernes.

BT Sport emitirá 42 partidos por temporada. Ha pagado 960 millones de libras y se queda con los encuentros de los sábados (18:30) y los partidos de las jornadas que se jueguen entre semana (a excepción del partido del lunes noche y de la novedad del partido del viernes). 

Con estas cifras sobre la mesa, falta esperar por ver en que se traduce en los equipos, sobre todo para los empleados de los clubes y para el precio de las entradas, que se había disparado bastante en los últimos años. El aficionado medio entiende que con el nuevo contrato puede producirse una rebaja en el precio de los tickets. El trabajador medio también entiende que puede ver modificado su sueldo como empleado del club. Habrá que ver. Por el momento, Richard Scudamore, presidente ejecutivo de la Premier League, en una entrevista en la BBC Radio, ha dejado caer que cada club puede utilizar el dinero que va a recibir como le venga en gana, por lo que podemos asistir a que los empleados sigan cobrando lo mismo (algunos están bastante hartos de su situación) y que no se mueva el precio de las entradas.

Por si fuera poco, al nuevo contrato todavía le faltan algunos flecos para que esté cerrado totalmente. Esto es, aún la Premier tiene que vender los derechos para la explotación de la competición en el extranjero. Y su mercado es bastante amplio y con mucho éxito. Estamos hablando de que al nuevo contrato podrían sumársele cerca de 2.000 millones más. Que siga el show.