Cómo bien dijo Julio César,”La mujer del César no sólo tiene que serlo, también parecerlo”, y la selección española ni lo ha sido ni, mucho menos, lo ha parecido.
Nos hemos encontrado con un equipo sin alma, sin ideas, sin juego, sin espíritu luchador ni ganador…No es criticable la postura de la mayoría de españoles que han querido llevar a su equipo a lo más alto de nuevo, con un apoyo incondicional y una fe ciega; pero hay que ser coherentes, y este equipo no daba para más, deportivamente estaba KO. Pero esta historia no empezó ayer, esta historia empezó a fraguarse hace dos años y en la Copa Confederaciones ya pudimos presagiar lo que se nos venía encima.
Pero ¿Quién tiene la culpa de este despropósito? La respuesta es fácil: el Sr. Vicente del Bosque, que no ha sabido gestionar el ya famoso “cambio generacional”, ni mucho menos la arrogancia, llamémoslo así, de algunos de sus jugadores.
Los problemas de ésta selección son muchos y variados; por un lado tenemos la decadencia de la base del equipo, jugadores que no han tenido continuidad o que no han estado al 100% en sus respectivos equipo, ya sea por lesiones, problemas internos, cansancio acumulado durante estos seis años o por edad, que también hay que decirlo. Por otro lado, tenemos la condescendencia del Sr. Del Bosquepara con sus jugadores; no ha sabido ejercer de entrenador porque no es un líder…los líderes son otros, y así, difícilmente se puede llevar a cabo un cambio en el equipo. Ya apuntó maneras en su último año en el Real Madrid, cuando tuvo que “enfrentarse” a Fernando Hierro y compañía; entonces, si no se ve capacitado para tal oficio, ¿por qué no dimitió y dejó su sitio a otra persona con arrestos suficientes para barajar al vestuario? Claro, es que el puesto es más que suculento y el peloteo que a uno le hacen le sienta muy bien al ego.
En otro punto, tenemos el sistema de juego, el llamado fútbol “de toque”, “culto” o “moderno”, fútbol que ya se saben todos los oponentes al detalle, cualquiera es capaz de anular este sistema en cuanto se quiera correr e ir hacia arriba…lo lamento, pero el “fútbol moderno” murió hace más de un año. Y ya por último, y desde luego, no menos importante, tenemos a nuestra “prensa patria”, una camada de pelotas insatisfechos incapaces de hacer una puñetera crítica constructiva, incapaces de RETRANSMITIR un partido porque están de colegeo, incapaces de valorar a un hombre por lo que hace en el campo y sí por las copas que se toman con él, incapaces de…con la barbaridad de periodistas preparados y dispuestos a dejarse la piel que hay en España y que tengamos que aguantar este despropósito?!?!
Hace un año la Selección Española sub-21 fue campeona de Europa…ahí teníamos una base de equipo más que sólida. Hombres jóvenes y experimentados, que ya tienen una trayectoria juntos: Carvajal, Alberto Moreno, Illarramendi, Iñigo Martinez, Isco…pero no interesaba…al igual que seleccionar a viejos conocidos como Navas o Llorente, imprescindibles en un “plan B”, que hubiese sido muy necesario. Pero…claro, el juego de Navas es muy rápido y tiene un gran desborde y Llorente se siente más cómodo en un juego mucho más directo; a ambos le viene bien un juego vertical…nada que ver con el “fútbol moderno”.
Y como, “Al César, lo que es del César”, decir que, un “cambio generacional” no se hace en dos días, y menos, después de ser una generación que ha hecho historia. Pero, al final, Señores, habéis hecho historia, sí…pero esa historia que nunca hubieseis querido escribir…