Que el vasco es una persona seria, arisca e incluso algo soez es un tópico, y que el andaluz es una persona vaga, zalamera y lisonjera es un topicazo. Y parecer ser que es lo único en lo que están de acuerdo estos dos grandes pueblos, en que “eso no es cierto”. Pero si existe un tópico es porque existe una base que así lo proclama. Pero la realidad es que son pueblos antagónicos, sus caracteres y costumbres son completamente opuestas, y el celo por sus tradiciones es algo que roza lo sagrado.
Y en el terreno de juego, como no podía ser de otra manera, el conjunto vasco es una roca. Bien formados, bien estructurados, sólidos en defensa, contundentes en ataque. Pueden jugar al toque, pero son letales a la contra con hombres como Iturraspe, Mikel Rico o Ander Herrera. En banda tienen auténticos misiles como Munian, Susaeta y De Marcos. El muro de contención que tienen por defensa, es complementada con San José y Laporte. Sus jugadores son serios y dados a pocos aspavientos y muestras de cariño público. Sería raro ver a cualquiera de ellos haciendo gestos a la afición como, anoche mismo, M´bia en Turín.
En la película no se toca este tema, pero…¿cómo hubiese desarrollado esa escena?
Pongámonos en situación: la trama se desarrolló hace un año, más o menos, días después de la Feria de Abril. Amaia le presentará a Koldo, su padre, a su novio y están en un restaurante en el que hay doce platos en el menú; no para elegir entre los diez platos, no, todos entran en el menú:
Koldo manda a Amaia, con mucha insistencia, a por la carta de vinos; éste quiere tantear al futuro yerno… pero Antxon, muy nervioso, es el que rompe el hielo…
- Antxon: “¿Y el Atletic este año…? Tiene mala pinta…uff…¿descenderá?
– Koldo : Ahí va la hostia!! ¿¡Cómo que va a descender!?, el Atlétic no descenderá nunca. El año que viene nos vamos a Champions, hostias!!
– Antxon: ¿A Champions dices…?
– Koldo : Y estrenando estadio, hostias!!!
– Antxon: pero si no está terminado…
– Koldo : me cago en dios!! Pues nos apretamos, ¿tienes algún problema en eso?, hostias.
– Antxon: no no…yo sólo comentaba…es que la perdida de Javi Martinez se ha notado y ahora se irá Llorente…
– Koldo : Ahí va la hostia!!…pues para eso está ya Aymeric Laporte, y que dejen ya de titular a Iker Muniain y punto…ya está hostias!!
– Antxon: ahh perfecto…y con eso llegaremos a Champions…ya… y bueno…vascos, vascos…lo que se dice vascos…no son…¿no?
– Koldo : Pues me voy a cagar en la órdiga otra vez!!!…!!¿tu eres de la Real?!!.
– Antxon: no no, yo soy vasco puro puro…nada de eso…Que nos vamos a champions hombre!! hostias ya!!!
– Koldo : Eso es hombre ya!!! Además a Laporte y Muniain ya les buscaron los ocho apellidos vascos…no hay problema pues.
– Antxon: bueno…vale…si no hay problemas…(se habrán ido hasta la prehistoria para buscarlos, pensó) A Champions hostias!!!. Y… ¿el entrenador? ¿Otra vez Clemente?
– Koldo : Me cago en dios…yo te matooo hostias ya!!!…
Esto es una simple parodia, pero lo que si es cierto son los idilios vividos en la ciudad hispalense entre vascos y béticos, como nos presenta el argumento de la película. Recuerdo a Roberto Rios por el Villamarín y lo a gusto que estaba en la entidad, y más recientemente a Beñat y su idílico paso por el Real Betis Balompié de la mano de su amigo Cañas. Compartieron trabajo y vida durante cuatro años. Pero el vasco volvió a sus orígenes y el andaluz no quiso, o no pudo continuar y también partió, pero a tierras británicas. Los años pasarán y no sabemos nuestro destino, pero…¿duraran sólo cuatro años Amaia y Antxon? ¿Cañas y Beñat volverán a compartir vida y trabajo? Sólo el tiempo nos lo dirá…