Guilherme Cassio Alves fue un delantero rayista, ídolo de toda una generación de aficionados a la franja. Militó en el equipo vallecano entre las temporadas 94-95, en la que el Rayo consiguó en ascenso a primera división, y la 95-96, que coincidió con el descenso a segunda nuevamente.
Los años que pasó Guilherme, fueron muy fructíferos, ya que fue un gran goleador. De hecho, fue el jugador que anotó en más jornadas consecutivas (5) cifra a posteriori igualada por el canario Rubén Castro.
A guilherme, siempre se le recordará por ser el artífice de la gran hazaña de vencer en el Santiago Bernabéu gracias a su doblete, que además supuso la destitución del hasta ese momento técnico merengue, Jorge Valdano.
Incluso el año de su marcha, Guilherme consigue una cifra goleadora muy aceptable,(14 tantos) pero no puede hace nada por evitar el descenso del Rayo Vallecano a segunda división.
Con el Rayo descendido, se acuerda su marcha a Brasil, al Gremio, en el que no consigue buenas cifras goleadoras. Posteriormente, es traspasado a Vasco de Gama, donde tiene una serie de problemas con la ficha, ya que se al haber estado inscrito con Gremio, no puede participar en el Campeonato Brasileño.
El año siguiente vuelve el mejor Guilherme, coincidiendo con su fichaje por Atlético Mineiro. En ese equipo consigue cifras goleadoras muy buenas, lo que hace que llegue a ser el máximo anotador del campeonato en 1999, e incluso comenzó a ir a la Selección Brasileña absoluta, con la que juega 6 veces, anotando un gol.
Durante su etapa en Atlético Mineiro, que duro hasta el año 2002, acude a la Copa América con Brasil llamado por Scolari, entonces seleccionador carioca, en un equipo en el que hay jugadores como Dida, Belletti, Cris, Denilson, Juninho Pernambucano o Mario Jardel.
La temporada 2002-03, juega en el Corinthians, con buenas cifras goleadoras, anotando 13 goles en 19 encuentros. pero es ahí donde tiene lugar un suceso que marca su vida. Es declarado culpable de homicidio involuntario cuando tiene un accidente en el que fallecen 2 personas. Se le condena posteriormente a 5 años de prisión, la cual evita llegando a un acuerdo con la fiscalía.
Acabada su cesión en Corinthians, vuelve al Atlético Mineiro, donde ya no consigue ser el delantero que fue. Necesitado de un cambio de aires, ficha por el Al-Ittihad de la liga de Arabia Saudí. Tampoco resulta una gran experiencia, y vuelve a Brasil solo un año después de la mano de Cruzeiro durante una temporada, y posteriormente juega en Botafogo, su último equipo profesional, en el que se le detecta una anomalía cardiaca, que sumada a varias lesiones durante su carrera, fuerzan su retiro en el año 2005 cuando contaba con 33 años.
Guilherme, quiere seguir ligado al fútbol, y se hace entrenador. En sus inicios como técnico, es entrenador asistente de Atlético Mineiro con Vanderlei Luxemburgo como entrenador principal.
Finalmente da el salto como primer entrenador, y se hace cargo del Ipatinga en 2011, del que fue cesado. Firmó por el Marilia la siguiente temporada, y actualmente dirige al Novorizontino.
De esta manera, Guilherme, ídolo de otra época, quiere aprender y tener los conocimientos adecuados para llegar en un futuro, a ser un gran entrenador de la liga carioca, y quién sabe, quizá algún día pueda ser el entrenador del Rayo Vallecano.
